Han dejado el corazón en la orilla,
refugiaron sus sueños en paraguas de colores,
ya se asoman los reflejos de sus almas,
en las aguas transparentes del olvido.
Para apagar la oscuridad vivida,
pintan de dulzura el camino añorado,
tejen una senda, dibujan senderos
y paso tras paso se alejan del miedo.
Tal vez equivoquen las veredas,
tal vez la luz del sol ciegue sus miradas,
puede que las sombras vistan sus recelos,
pero han aprendido a ver en colores
y a sentir la vida más allá del blanco y negro.
Texto: Carmen Martagón
Imagen Claude Theberge
colaboración con El club de la Poetisas
pintan de dulzura el camino añorado,
tejen una senda, dibujan senderos
y paso tras paso se alejan del miedo.
Tal vez equivoquen las veredas,
tal vez la luz del sol ciegue sus miradas,
puede que las sombras vistan sus recelos,
pero han aprendido a ver en colores
y a sentir la vida más allá del blanco y negro.
Texto: Carmen Martagón
Imagen Claude Theberge
colaboración con El club de la Poetisas
Comentarios
Publicar un comentario